La nueva First Lady non es diversa solo por el color de la piel. A diferencia de la mayoría de las First Ladies que la han precedida en la Casa Blanca, Michelle parece firmemente decidida a mantener un papel protagonista, “de alto perfil” como diría un politólogo, en las relacione internacionales de los EEUU. Traduzco de la edición digital de hoy del “Corriere Della Sera”: “Su segundo viaje a Europa (con las dos hijas, n.d.t.) confirma su decisión…de asumir un papel más elevado, aun manteniendo la unidad de la familia. Michelle dará más discursos, participará en más campañas y será la embajadoras itinerante de la administración de su marido en el interior de EEUU”.¡Olé para sus….!
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